UB David + I'll B Jonathan, Inc.

bajo un acuerdo especial con


Esta lección está escrita por El Club del Buzón


presenta "Ver y Hacer"

 

UB David + I'll B Jonathan, Inc.

bajo un acuerdo especial con

El Club del Buzón

presenta

Ver y Hacer

Lección 5: ¿Soy Yo Demasiado Pequeña?

¿Soy Yo Demasiado Pequeña?


Era un día hermoso. Carlos Carlos y Ana Ana preguntaron a mamá mamá si ellos podían jugar en el parque.

"Sí", dijo mamá "Pero no ensucien su ropa ropa . Iremos a ver a su abuelita hoy".

"Tendremos cuidado", dijo Ana.

vieron una tabla larga colocada para cruzarlo

Cuando ellos llegaron al pequeño arroyo, vieron una tabla tabla larga colocada para cruzarlo. Carlos comenzó a caminar a través de la tabla.

"Yo voy a cruzar sobre estas piedras piedras," dijo Ana mientras se quitaba los zapatos y calcetines. "Es más divertido que caminar sobre la tabla".

"Mejor no lo hagas," le advirtió Carlos. "¡Recuerda, mamá nos dijo que no ensuciáramos nuestra ropa !"

"No me ensuciaré", dijo Ana. Ella comenzó a cruzar el arroyo caminando sobre las piedras. Carlos se sentó a esperarla al otro lado del arroyo.

ella resbaló de repente y cayó dentro del agua llena de lodo

El arroyo no era muy profundo. Las piedras estaban cerca una de la otra pero eran muy resbalosas. CuandoAna llegó a la ultima piedra, ¡ella resbaló de repente y cayó dentro del agua llena de lodo!

"¡Oh, no, Ana ! Tu vestido se ensució", dijó Carlos. "¿Qué va a decir mamá ? Ella nos advirtió que no nos ensuciáramos nuestra ropa ".

"Lo sé", dijo Ana. "Yo no quería hacerlo, pero mi pie resbaló y me caí". Ana trató de limpiar el vestido, pero cuanto más lo limpiaba, peor se veía.

Cuando regresaron a casa, mamá vio el vestido de Ana y meneó la cabeza. "Les dije que no ensuciaran su ropa Ana".

Ana agachó su cabeza y dijo: "Lo siento, mamá. Yo sé que hice mal al desobedecerte. Por favor perdóname".

"Sí, yo te perdono", dijo mamá, "pero tú debes aprender a obedecerme".

Ana se quedó callada por un momento. Entonces dijo: "Mamá, ¿puedes por favor orar por mí y pedirle al Señor Jesús Jesús que venga a mi corazón para que así pueda obedecerte mejor?"

Mamá sentó Ana a sobre sus rodillas

mamá sentó a Ana sobre sus rodillas y dijo: "Me alegra que quieras que el Señor Jesús venga a tu corazón, Ana, pero yo no puedo pedirle a El que lo haga. Tu debes hacerlo por ti misma".

“Pero yo pensaba que yo era muy pequeña para pedirle a Jesús que viniera a mí corazón. Por favor mamá, dime, ¿soy yo demasiado pequeña?"

"No, yo no lo creo así", dijo mamá.

Luego abrazando a Ana le dijo: "Déjame explicarte algo. La Biblia Biblia dice que nosotros nacemos con pecado en nuestro corazón. Por eso es que hacemos cosas malas, como desobedecer. Un pequeño bebé no entiende esto. Pero yo creo que tú sabes cuando tú estás haciendo algo malo, ¿no es así, Ana?"

Ana movió su cabeza afirmativamente y dijo: "Sí, yo sabía que era malo caminar sobre esas piedras resbalosas hoy. Tú nos acababas de decir que no ensuciáramos nuestra ropa ".

mamá sonrió. “Me alegro que te des cuenta cuando haces cosas malas. El Señor Jesús también sabe sobre el pecado que hay en nuestros corazones. El murió en la cruz por nosotros para que podamos ser salvos de nuestros pecados.

"Cuando tienes edad suficiente para saber que has obrado mal, entonces tienes edad suficiente para pedirle a Jesús que perdone tus pecados y sea tu Salvador".

Ana dijo: "Pero algunas personas personas dicen que no se puede recibir a Jesús como Salvador hasta que uno tenga nueve o diez años de edad".

mamá respondió: "Sí, incluso algunos piensan que tienes que tener muchos más años para que puedas ser salvo. Pero Dios nos dice en la Biblia Biblia que ‘todo aquel que invocare el Nombre del Señor, será salvo’. Así que ‘todo aquel’ significa cualquier persona que quiera, incluso niños pequeños".

"¿Quieres decir que yo puedo recibir a Jesús como mi Salvador ahora mismo?" preguntó Ana ansiosamente.

"¡Sí, tú puedes orar ahora mismo!" dijo mamá.

Ellas se arrodillaron y Ana oró: "Querido Señor Jesús, me arrepiento de las cosas malas que he hecho, y quiero dejar de hacerlas. Por favor perdóname. Gracias por amarme y morir por mí. Por favor ven a mí corazón para que seas mi Salvador. Me siento feliz que no soy demasiado pequeña para pedirte perdón".

Querido (a) niño (a)

por favor perdóname

Tú no necesitas esperar más. El Señor Jesús te ama, y El te salvará si tú se lo pides. ¿Por qué no le pides a El que te salve ahora mismo? Sólo ora a El de este modo:

“Querido Señor Jesús, yo sé que he pecado, y de verdad estoy arrepentido por mis pecados, por favor perdóname. Te agradezco por amarme tanto y morir en la cruz por mis pecados. Por favor ven a mi corazón para que seas mi Salvador y mi Señor”.


Aprende este versículo para que lo puedas decir:

^arriba

Real Time Web Analytics